lunes, 25 de febrero de 2008

Cuestiones para adolescentes gay

CUESTIONES VARIAS PARA ADOLESCENTES HOMOSEXUALES

¿QUÉ SIGNIFICA SER GAY?

Los hombres que se llaman a sí mismos gay se sienten atraídos sexualmente por otros hombres y se enamoran de ellos. Sus sentimientos sexuales hacia los hombres son normales y naturales para ellos.

Estos sentimientos aparecen cuando son muchachos y continúan hasta cuando se hacen adultos. Si bien algunos hombres gay pueden sentirse atraídos también por las mujeres, por lo general dicen que sus sentimientos por los hombres son más fuertes y más importantes para ellos.

Sabemos que aproximadamente una de cada diez personas en el mundo es gay o lesbiana (las lesbianas son mujeres que se sienten atraídas por otras mujeres), lo cual significa que en cualquier grupo numeroso de personas, por lo general hay varias personas gay.

Sin embargo, no puede saberse si alguien es gay o no, a menos que la persona desee que tú lo sepas. Las personas gay se mezclan con las otras personas de modo indetectable, pero a menudo sienten en forma diferente a las otras personas.

Los adolescentes gay tal vez no puedan expresar exactamente por qué sienten en forma diferente. Todos los muchachos que conocen aparentemente se sienten atraídos por las muchachas, por lo que no saben qué lugar ocupan. Además, tal vez no se sientan cómodos hablando con un adulto sobre sus sentimientos.

¿COMO SE SI SOY GAY?

Tal vez tú no sepas cómo llamar a tus sentimientos sexuales. No tienes que apurarte y decidir cómo definirte ahora mismo. Nuestras identidades sexuales se desarrollan con el tiempo.

La mayoría de los muchachos son intensamente sexuales durante los años alrededor de la pubertad (generalmente entre los 11 y los 15 años), cuando sus cuerpos comienzan a cambiar y sus hormonas fluyen de modos diferentes.

Tus sentimientos sexuales tal vez sean tan fuertes que no estén dirigidos hacia personas o situaciones en particular, sino que parecen producirse sin causa alguna. A medida que vayas creciendo, te figurarás por quién te sientes atraído en realidad.

Los muchachos con verdaderos sentimientos gay descubren que, con el tiempo, su atracción por muchachos y hombres se torna cada vez más clara. Tal vez te estés enamorando de tus compañeros de clase o de un hombre adulto en particular. Tal vez encuentres que estas experiencias son placenteras, perturbadoras o una combinación de
ambas.

Para cuando tienen 16 ó 17 años, muchos adolescentes gay comienzan a pensar en cómo llamarse a sí mismos, mientras que otros prefieren esperar. Si tú piensas que tal vez seas gay, las siguientes son algunas preguntas que podrías hacerte:

Cuando sueño o tengo fantasías sexuales, ¿es acerca de muchachos o muchachas?

¿He tenido alguna vez una pasión por un muchacho o un hombre o me he enamorado de ellos?

¿Siento diferente que los otros muchachos?

¿Son verdaderos y claros mis sentimientos por los muchachos y los hombres?

Si no puedes responder estas preguntas ahora, no te preocupes. Con el tiempo tendrás más seguridad. Tú y sólo tú sabrás cómo definirte correctamente.


INFORMARTE ES FORMARTE

Por eso, tal vez estés listo para averiguar más.

Comienza por leer. Si no te incomoda, pregunta al bibliotecario de la sección "Jóvenes adultos" de tu biblioteca pública. Los bibliotecarios por lo general se complacen en ayudar.

Si tu biblioteca no tiene mucho material sobre sexualidad, puedes consultar la sección "GAY" de una librería grande o posiblemente encargar libros y otros materiales por correo.

Cabe citar que no todos los libros sobre personas gay son informativos y recomendables. Lógicamente como en toda área, existen libros pornográficos, exagerados, y de pésimo contenido.

En caso de dudas, también puedes preguntar en la asociación gay de tu ciudad o zona, puesto que es posible que haya un grupo de adolescentes gay en tu área. Recuerda, las personas gay están en dondequiera que tú estés. Confía en tus instintos. Tarde o temprano hallarás a alguien que siente algunas de las mismas cosas que tú sientes.


¿ RELACIONES SEXUALES ?


Naturalmente, piensas en hallar un escape a tus sentimientos sexuales. Convertirse en una persona sexual sana es parte del proceso de asumir tu propia sexualidad.

La perspectiva de tener relaciones sexuales tal vez te asuste. Esto es normal para todos. Nadie debe comenzar a tener relaciones sexuales hasta no estar listo, hasta no sentirse interiormente y psicológicamente preparado.

Hasta entonces, tal vez optes por masturbarte o tener fantasías sexuales. El sexo sólo debe darse entre personas maduras que se quieren. Tú sabrás cuando haya llegado el momento.

Todos optamos por tener relaciones sexuales en formas diferentes, ya sea que seamos gay o heterosexuales.

Los hombres gay escogen entre una amplia gama de prácticas sexuales, incluida la masturbación (ya sea solos o con otra persona), el sexo oral, el coito anal, los besos, los abrazos, los masajes, jugar o retozar en la cama, tomarse de la mano, acurrucarse contra la pareja o cualquier otra cosa que atraiga a ambos integrantes de la pareja.

Tú tienes completo control sobre lo que haces sexualmente y con quién lo haces.

Y JAMÁS debes aceptar realizar ninguna acción o acto o juego que no desees hacer.

NO SOLO EL SIDA ES EL ENEMIGO SANITARIO

Todas las personas sexualmente activas deben tener conciencia del SIDA y de otras enfermedades de transmisión sexual (ETS).

Es este mismo portal tienes una tabla con los datos mas relevantes referentes a este tipo de enfermedades. (Cuerpo & sexualidad / Enfermedades)

Ser gay no te transmite el SIDA pero ciertas prácticas sexuales y ciertos comportamientos de uso de drogas pueden ponerte en riesgo de contraer el virus que causa el SIDA. El SIDA es incurable pero puede prevenirse. A continuación indicamos cómo disminuir tu riesgo de contraer el SIDA:

No te inyectes drogas. Compartir agujas es la conducta más peligrosa en cuanto a contraer el SIDA.

Evita el coito anal u otro contacto anal directo. El coito anal transmite el virus en forma muy eficiente.

Si practicas el coito anal, haz que tu pareja use un condón diferente cada vez.

Usa condones siempre que practiques el sexo anal u oral (o el sexo vaginal si tienes relaciones sexuales con mujeres). Debes escoger condones de látex nuevos y sin roturas. Guárdalos lejos del calor (tu billetera no es un buen lugar donde guardarlos). Usa cada condón una sola vez. Trata de escoger condones con "puntas de depósito", y asegúrate de quitar el aire de la punta apretando el condón al ponértelo. Sujeta el condón al retirar el pene; a veces, se salen después del sexo.

O bien, escoge actividades sexuales que no requieran el coito: abrazos, besos, charlas eróticas, masajes, o masturbación (con la piel intacta y sin heridas).

Si practicas una felacion (mamada, chupada, etc) NUNCA tragues o ingieras el semen de tu pareja.

El comentario general es recordar que el virus del SIDA se transmite fundamentalmente por la sangre y el semen, entre los fluidos corporales.


APRENDIENDO A GUSTARTE A TI MISMO


No es fácil descubrir que uno es gay. Nuestra sociedad nos dice muy claramente lo que piensa de las personas gay. Todos oímos las terribles bromas, los estereotipos hirientes y las ideas equivocadas que circulan sobre las personas gay.

La gente tiende a odiar o temer lo que no comprende. Algunas personas odian a las lesbianas y a los gays. Muchas personas se sienten incómodas en presencia de lesbianas y gays.

No es de sorprender que tú optes por ocultar tus sentimientos homosexuales de los demás. Hasta podrías sentirte tentado a ocultarlos de ti mismo.

Tal vez te preguntes si eres normal. Tal vez te preocupe que la gente se entere de tu orientación sexual. Tal vez evitas a otros muchachos que podrían ser gay por lo que pueda pensar la gente. Esforzarse tanto por ocultar tus pensamientos y sentimientos se llama "estar en el armario, o estar en el closet", según el país.

Es un lugar doloroso y solitario, aun cuando permanezcas allí para sobrevivir. Requiere mucha energía negar tus sentimientos y puede resultar costoso.

Tal vez hayas tratado de insensibilizarte a estos pensamientos por medio del alcohol u otras drogas o incluso hayas considerado el suicidio.

De ser así, no dejes de consultar a un profesional de confianza, a un adulto con el que puedas hablar honestamente y tranquilamente, un colectivo de jóvenes gays de tu zona o localidad, o también puedes enviarnos un Email a ISLA TERNURA e intentaremos apoyarte y orientarte en la superación de esa crisis.

Recuerda que TU eres una persona por encima de todo, y NADIE tiene el menor derecho a machacarte, a aplastarte o a criticarte por tu orientación erótica. Eres una persona seguramente sensible, cálida y sobre todo inteligente. Eres eso ni mas ni menos: una PERSONA.


¿DEBO CONTARLO? ¿CON QUIEN DEBO SINCERARME?


El momento en que cada persona decide contar su orientación erótica es una decisión totalmente personal y DE NINGUNA MANERA debe ser una decisión tomada por otro. Los jóvenes que sienten el deseo de hablar con los demás sobre sus sentimientos deben encontrar un lugar donde se sientan seguros, un entorno receptivo y comprensivo y unos interlocutores que acepten esa realidad

Las personas a las que resulta más positivo contarles son aquéllas que lo aceptan y que no sólo dicen que está bien, sino que lo demuestran por la forma en que te tratan

Cada vez son más los adolescentes gay que aprenden a sentirse bien consigo mismos. A medida que comiences a escuchar tus sentimientos más profundos y aprendas más sobre lo que significa ser gay, comenzarás a sentirte cómodo con tu sexualidad.

Este es el proceso denominado "salir del armario" y no es una cuestión obligatoria, sino una decisión importante y personal sobre todo.

El primer paso es decirte a ti mismo que eres gay y decir, "no hay nada malo en ello".

Más tarde puedes decírselo a otra persona -alguien en quien confíes que sea compresivo y te brinde apoyo.

Puedes escoger a un amigo o un adulto de tu confianza. Es probable que quieras cultivar la amistad de otros muchachos gay o una relación más íntima.

Algunos muchachos gay pueden decirle a sus familias que son gay. Tú debes decidir si decírselo a tu familia o no y escoger el momento adecuado.

Muchas personas, incluidos los padres, sencillamente no comprenden a los gays y es difícil decírselo.

Al principio, ten mucho cuidado a quién se lo dices.

La mayoría de los muchachos que aceptan su sexualidad dicen que se sienten más tranquilos, más felices y tienen más confianza en sí
mismos.

La crisis de la juventud gay

LA CRISIS DE LA JUVENTUD GAY


La alta incidencia de suicidios entre los adolescentes gay, lesbianas o que cuestionan su identidad sexual ha llevado a Jorge valencia a tomar cartas en el asunto

Durante su adolescencia Jorge Valencia (un actor conocido en EE.UU.) nunca comprendió por qué su mejor amigo, un joven simpático y lleno de energía al que todos admiraban, se consumió en silencio en un estado de depresión que culminó el día en que se quitó la vida. "Es evidente que en su desesperación, nunca se sintió cómodo para hablar con su familia o sus allegados sobre sus problemas y pensó que nadie lo podía ayudar", dice Valencia, quien prefiere no divulgar el nombre de su amigo. "Ojalá él hubiese sabido que la ayuda sí existe".

Como la tragedia del suicidio afecta profundamente no sólo a su víctima, sino a todo el que le rodea, Valencia vivió años de tristeza y frustración por no haber podido ayudar a su amigo. Hasta el día en que este actor de origen mexicano participó en un evento del Proyecto Trevor y decidió poner manos a la obra. Hoy, como director ejecutivo de esta organización sin fines de lucro en Los Ángeles, Valencia y su equipo de especialistas y consejeros se dedican a educar a la comunidad sobre la alarmante incidencia de suicidios entre los jóvenes gay, lesbianas o que cuestionan su orientación e identidad sexual. "Si el suicidio es la tercera causa más común de muerte entre jóvenes de 15 a 24 años, los casos se triplican entre los adolescentes homosexuales", explica Valencia. "Por eso nuestra labor es tan importante".

Pero la gestión más significativa del Proyecto Trevor reside en la intervención en momentos de crisis que brinda de forma gratuita y totalmente confidencial. Mediante su línea telefónica de apoyo a nivel nacional, todo aquel que busca consuelo, empatía o consejería por estar al borde del suicidio puede encontrar una luz al final del túnel. "No vamos a decirle al joven 'tú eres gay' o que hay algo malo o bueno con su situación", afirma Valencia. "Es normal para un chico tener sentimientos encontrados con respecto a su sexualidad. Lo que queremos es mantenerlos vivos y seguros a toda costa, para que luego puedan identificar a su propia red de apoyo".

Y es que para los adolescentes, en especial para aquellos que se sienten en conflicto con su orientación sexual y al margen de su familia y la sociedad, es crucial contar con alguien de mente abierta que los escuche. Ya sea algún familiar, un amigo, miembro de su iglesia o algún profesional de la salud, es importante que un adolescente en crisis tenga con quien compartir sus dudas y preocupaciones. Sin embargo, según los expertos, el arraigo social a los estereotipos negativos y los rígidos conceptos morales que definen la homosexualidad como algo nocivo o patológico perpetúan el ambiente de hostigamiento y hasta la violencia que sufre frecuentemente la comunidad lésbica, gay, bisexual o transgénero (LGBT, por sus siglas en inglés).

"Hasta en la escuela, los maestros y consejeros muestran resistencia a hablar de la homosexualidad por [un falso] miedo a promoverla", afirma Víctor Martínez, director de prevención y educación de la unidad LGBT de la organización Bienestar Servicios Humanos en el sur de California. "Como si fuera la gripe que se va a contagiar". Como resultado de esta opresión y rechazo surgen los sentimientos de vergüenza y desahucio que le provocan al joven el pensamiento de que no hay otra salida que no sea la muerte.

Entre los adolescentes hispanos, el problema parece agravarse ante el imperante machismo y el conservadurismo religioso que caracteriza a la cultura latinoamericana. "Me infundieron la idea de que ser homosexual era la perversión más baja y el peor de los pecados", recuerda el ecuatoriano Francisco Guayasamín, que ya de adulto ha logrado superar sus sentimientos suicidas. "Mi padre adoptivo decía que prefería un hijo muerto a uno homosexual. Pensé que no tenía futuro y era mejor morir".

Para Juan, un joven de Austin, TX, que prefiere mantenerse en el anonimato ante la imposibilidad de compartir con su familia que es gay, su situación lo ha llevado no sólo a considerar el suicidio, sino a terminar toda relación con sus familiares. "Me perturbaba escuchar el menosprecio que sentían al ver a un personaje gay en la televisión", comenta Juan sobre la falta de modelos positivos de la comunidad gay o lésbica en los medios de comunicación. "¿Cómo iban a reaccionar conmigo? Con la ayuda de mis amigos comprendí que no soy el único que se siente así".

Los expertos también hacen hincapié en que el suicidio no siempre es inmediato. "Algunos jóvenes emprenden comportamientos autodestructivos, como el abuso de las drogas o el sexo sin condón", acota Martínez. "Otros, que son echados de sus casas se van a la calle a prostituirse para sobrevivir. Esta conducta, si bien no es un plan de suicidio, a largo plazo conlleva el mismo resultado".

Afortunadamente, son iniciativas como la del Proyecto Trevor y Bienestar Servicios Humanos las que les tienden una mano amiga a los adolescentes homosexuales más consumidos por el rechazo y la violencia. En el caso de Bienestar, que tiene acceso a recursos en toda la nación, los jóvenes de la comunidad LGBT y aquellos que viven con el virus VIH o SIDA pueden también recibir ayuda y tratamiento. Ya sea mediante sus múltiples grupos de apoyo, servicio de referidos médicos o durante sus eventos culturales, además de ayudar a jóvenes en crisis, Bienestar promueve la aceptación de estos grupos minoritarios en la sociedad en general. "Queremos celebrar la diversidad de la comunidad latina", asegura Martínez. "Y abrir un espacio de aceptación tanto para el joven como para su entorno familiar y social".

El suicidio de adolescentes se puede evitar. "Hay esperanza y gente dispuesta a ayudar", afirma Valencia, "para que el mundo no pierda más personas buenas por la desesperación".

¿Porque mi hijo es gay?

Objetivos del folleto

* Aprender cómo los científicos e investigadores expertos en la materia, responden a las preguntas formuladas más a menudo por los padres y amigos de los gays y por los mismos homosexuales.

* Determinar si las respuestas de los científicos presentan una misma opinión Este folleto está escrito para los padres y amigos de los gays, para los gays y las lesbianas, y para los médicos, líderes religiosos, maestros, consejeros y otros profesionales, así como para cualquier persona interesada en la educación de la orientación sexual y del desarrollo humano. ?Por qué plantearse estas preguntas?


?Por qué mi hijo es gay? ?Por qué un hijo es homosexual, mientras que otro hijo de los mismos padres es heterosexual?

Estas son preguntas válidas.

Algunos padres quizás digan: "Lo que será, será. ?Por qué analizar las cosas que no podemos cambiar?" Otros padres - -ya sea por su curiosidad natural o por su deseo de aceptar el hecho que su hijo es gay en una sociedad heterosexual - -tratan de explorar los orígenes, la frecuencia y la historia de la homosexualidad masculina o del lesbianismo, antes de que puedan aceptar la homosexualidad o bisexualidad de su hijo como una realidad.


Breve historia a partir de Kinsey

Los cálculos actuales, desarrollados por primera vez por el Dr. Alfred Kinsey, indican que aproximadamente un diez por ciento de la población es gay. Se cree que esta proporción es más o menos la misma en el mundo entero, en todas épocas, culturas y climas.

Los sentimientos de atracción hacia las personas del mismo sexo parecen ser usualmente tanto afectivos como físicos. A finales de los años 40 el Dr. Kinsey desarrolló una escala que lleva su nombre y que muestra que las personas no son estrictamente homosexuales o heterosexuales, sino que fluctúan entre ambos.

En otras palabras, hay muchos hombres y mujeres cuya orientación sexual indica diferentes grados de bisexualidad. De ahí la Escala Kinsey de la Heterosexualidad y la Homosexualidad

Las investigaciones de Kinsey demostraron que la homosexualidad y la heterosexualidad no son fenómenos absolutos e independientes, sino más bien fenómenos conectados por un gran segmento de la población que posee diferentes grados de bisexualidad.

Lo anterior se refleja en la siguiente escala, adaptada del modelo de Kinsey:


La categoría cero (0) incluye a todas las personas que son exclusivamente heterosexuales y que reportan no tener o haber tenido ninguna experiencia o atracción homosexual.

La categoría uno (1) incluye a aquellos que son predominantemente heterosexuales, teniendo solo experiencias o atracción homosexuales incidentales.

La categoría dos (2) incluye a aquellos que son predominantemente heterosexuales, pero tienen experiencias o atracción homosexuales más que incidentales.

La categoría tres (3) representa a las personas que tienen tantas experiencias y atracciones homosexuales como heterosexuales.

La categoría cuatro (4) incluye a aquellos que son predominantemente homosexuales, pero tienen experiencias o atracción heterosexuales más que incidentales.

La categoría cinco (5) incluye a aquellos que son predominantemente homosexuales, teniendo solo experiencias o atracción heterosexuales incidentales.

La categoría seis (6) incluye a todas las personas que son exclusivamente homosexuales en experiencia y atracción.

La Dra. Evelyn Hooker de la Universidad de California en Los Ángeles, fue la primera científica en examinar la salud mental de los homosexuales a través de un estudio objetivo y controlado a fines de los años 50.

Sus investigaciones probaron que no hay ninguna diferencia en la estabilidad emocional y en la salud mental entre hombres homosexuales y heterosexuales.

Hasta el comienzo de los años 70, el estudio de la homosexualidad estaba restringido al área de la psiquiatría. Existían diferentes teorías respecto a las causas de la homosexualidad.

Gran parte de estas teorías asociaban a la homosexualidad con una psicopatología desarrollada por una crianza "defectuosa," basada en una madre dominante, en un padre alejado, o en ambos.

Aunque esta premisa fuese incorrecta, no es nada sorprendente que los psiquiatras la desarrollasen, ya que ellos obtenían su información únicamente de personas en terapia con problemas mentales o emocionales.

En 1972 y 1973 la Asociación Psiquiátrica Americana y la Asociación Psicológica Americana dejaron de considerar la homosexualidad como una enfermedad en sus manuales de diagnóstico.

A finales de los años 70 el Instituto Nacional de Salud Mental inició una extensa investigación para determinar si la homosexualidad era el resultado de una determinada situación familiar, de modelos inadecuados, o de otros factores psicológicos o sociales.

Los resultados de tal investigación fueron publicados en 1981 por Bell, Weinberg y Hammersmith en el libro "Preferencia Sexual: Su Desarrollo en Hombres y Mujeres".

(Nota: el término "preferencia sexual" fue introducido en los años 70 para corregir el concepto anterior que definía a la homosexualidad como una enfermedad o una desviación.

A partir de 1982, a medida que los científicos fueron descubriendo nuevas pruebas que sugerían que la homosexualidad o la heterosexualidad no es algo que se escoge, surgió el término "orientación sexual," el cual es usado frecuentemente hoy en día.)

La mayor parte de los lectores habrán notado una desalentadora escasez de información acerca del lesbianismo y sus orígenes. Muy pocos estudios fueron llevados a cabo acerca del origen de la homosexualidad femenina antes de los años 70, porque a través de los siglos la homosexualidad masculina ha sido más visible y menos tolerada que el lesbianismo.

PREGUNTAS Y RESPUESTAS

Muchas personas creen que la orientación sexual -- heterosexual, homosexual, bisexual -- está determinada por uno o más de los siguientes factores: genéticos, hormonales, psicológicos o sociales. Tomando en cuenta los últimos adelantos de la ciencia, ?cuál es su opinión?

Dr. Bell: Creo que la orientación sexual de un individuo está determinada por todos los factores mencionados en conjunto, pero que la importancia relativa de cada factor varía de individuo a individuo.

Eventos biológicos prenatales influyen en gran medida en el potencial para la conformidad de género del infante, y dicha conformidad influye profundamente a su vez en como percibe a los hombres y a las mujeres y en el potencial de ver a éstos como objetos afectivos.

Dr. Ellis: Según la evidencia científica más reciente, los factores más importantes en el desarrollo de la orientación sexual parecen ocurrir antes del nacimiento. Entre dichos factores prenatales, tenemos la influencia de varias hormonas sexuales en el funcionamiento del cerebro en y alrededor de un centro de control de instintos primarios, llamado "el hipotálamo".

Esta sección del cerebro no sólo parece controlar la orientación sexual, sino que también se ha demostrado que está organizada diferentemente en los hombres y en las mujeres, si bien con distintos grados de diferencia, dependiendo de la cantidad y del momento de exposición a la testosterona y a otras hormonas sexuales.

Distintos factores parecen capaces de alterar la cantidad de hormonas sexuales a las cuales están expuestos el hipotálamo y otros centros cerebrales cercanos. Algunos de estos factores son genéticos y controlan la síntesis de hormonas sexuales.

Estudios realizados en animales de laboratorio indican que la exposición de la madre a varias drogas neurológicamente activas o aúna un estrés excesivo durante el embarazo pueden también ser factores prenatales que invierten la orientación sexual. Un estudio reciente ejercido por mí y mis colegas (Journal of Sex Research, Feb 1988, pp. 152-57) encontró evidencia de que el estrés materno excesivo puede ser una causa de la homosexualidad masculina en los humanos. Aún así, hace falta investigar mucho más en esta área.

Dr. Green: Si esta pregunta requiriese una respuesta de "cierto o falso" la respuesta sería "cierto."

Existe una creciente acumulación de evidencia que indica que todos los factores mencionados afectan la orientación sexual. Probablemente la proporción de cada ingrediente varía de persona a persona, pero esos son todos los ingredientes para cada persona.

Dr. Herdt: La determinación de la orientación sexual es compleja y probablemente es el resultado de muchos factores. Un problema que encontramos cuando tratamos de determinar las causas de la orientación sexual es que probablemente existen vías diferentes para llegar a la "misma" orientación sexual, por ejemplo, a la heterosexual.

Otro problema es que hay una gran variación en el significado y la práctica de la orientación sexual -- por ejemplo, de la homosexual -- en nuestra sociedad. Yo pienso que muchos factores -- biológicos, sociales, psicológicos -- afectan al ciclo del desarrollo para producir una orientación sexual.

Dra. Hooker: Yo creo que la orientación sexual está determinada por una combinación de los factores mencionados, y que el peso y la importancia relativa de cada factor varía en gran medida de un individuo a otro. No existe una "causa" única. Así como la homosexualidad y la heterosexualidad son fenómenos enormemente complejos, los factores que determinan sus respectivos desarrollos deben ser complejos también.

Creo que los que buscan una causa única, tal y como una "madre íntima y dominante" o un "padre hostil, alejado o ausente," no están mirando más allá de sus narices.

Dr. Marmor: Todos los factores mencionados pueden ser causa, y por lo general, más de uno lo es.

Dr. Money: Los factores que determinan la orientación -- gay, heterosexual, o bisexual -- pueden ser genéticos, hormonales, o transmitidos "in utero", a través de la sangre que va de la placenta y el cordón umbilical al feto.

Actualmente no existe ninguna prueba incontrovertible de un determinante genético.

La prueba de la transmisión "in útero" necesita ser mejor comprobada. La evidencia hormonal prenatal difiere entre los cuadrúpedos y los primates, especialmente los primates humanos.

En los cuadrúpedos, las hormonas prenatales pueden ser manipuladas experimentalmente, de tal forma que influyan en las vías sexuales del cerebro y que determinen si el animal será exclusivamente homosexual o heterosexual en el apareamiento.

En los humanos y en otras especies de primates, las hormonas prenatales tienen una influencia menos absoluta. Dichas hormonas crean tan sólo una predisposición en la edad adulta hacia la homosexualidad o la heterosexualidad exclusiva, o hacia una adaptabilidad bisexual.

Basándonos especialmente en la evidencia antropológica y en la evidencia del desarrollo de la niñez, parecería que la mayoría de los seres humanos nacen con una predisposición bisexual.

Si esta predisposición es retenida, o si bien se convierte en predominantemente heterosexual u homosexual depende, al igual que con la lengua natal, de influencias -- generalmente denominadas Psicológicas y sociales -- que llegan al cerebro a través de los sentidos, especialmente del tacto, la visión y la audición.

El período de experimentación con juegos sexuales juveniles, especialmente entre los cinco y los ocho años, desempeña un papel particularmente importante en establecer si la atracción erótica en el futuro será dirigida hacia hombres o mujeres, y si la primera experiencia de enamoramiento será homosexual o heterosexual. La homosexualidad, así como la heterosexualidad, se define en última instancia por el sexo de la persona de quien uno puede enamorarse.

Dr. Pillard: La orientación sexual probablemente resulta de una combinación de causas -- genéticas, congénitas y del desarrollo -- y dicha combinación probablemente varía de individuo a individuo. Lo que es impresionante es que la orientación sexual parece ser innata, con lo cual quiero decir que es un rasgo de la personalidad bien arraigado, el cual surge en los primeros años de vida, como sea que esto ocurra.

He de restringir lo anteriormente dicho a los hombres. Las mujeres parecen ser más flexibles en su orientación y parecen ser capaces de modificarla dependiendo de las circunstancias. El aforismo es: Los hombres _descubren_ su orientación sexual, mientras que las mujeres _escogen_ la suya.

Dra. Reinisch: Nadie sabe cuáles son las "causas" de le homosexualidad. De la misma forma, nadie sabe cuáles son las causas de la heterosexualidad. Varias teorías han sido propuestas, pero hasta el día de hoy, ninguna ha sobrevivido un escrutinio cuidadoso.

De hecho, los científicos tienen probablemente una idea más clara de cuáles "no" son las causas de que una persona prefiera una pareja del mismo sexo.

Por ejemplo, los niños criados por padres o parejas gays o lesbianas no son más propensos a ser homosexuales que los niños criados por padres heterosexuales. Tampoco existe ninguna evidencia que indique que la homosexualidad masculina sea causada por una madre dominante o un padre débil, o que la homosexualidad femenina sea causada porque las niñas se identifiquen con modelos masculinos.

De hecho, tenemos evidencia que bajo condiciones normales de crianza, los padres tienen muy poca influencia sobre la orientación sexual de sus hijos. Tampoco es cierto que un joven se vuelve homosexual al ser seducido por una persona mayor del mismo sexo.

Las experiencias sexuales infantiles y adolescentes son relativamente similares en homosexuales y heterosexuales, excepto que los homosexuales obtienen menos satisfacción que los heterosexuales en sus experiencias sexuales con miembros del sexo opuesto.

Tanto los homosexuales como los heterosexuales varían en su comportamiento desde muy masculino a muy femenino, lo cual sugiere que existe una combinación de factores relacionados a la expresión de la orientación sexual y la identidad del sexo.

Dr. Weinberg: Mi conjetura es que factores biológicos determinan la homosexualidad y la heterosexualidad, mientras que factores ambientales determinan diferentes grados de bisexualidad. Dr. Weinrich:

Para poder responder esta pregunta correctamente, debemos establecer una definición precisa de la "homosexualidad"

Según la definición que yo uso, la orientación homosexual está causada probablemente por factores genéticos y hormonales, y quizás también por experiencias Psicológicas o sociales en la infancia temprana. La forma en que dichos factores se expresan en la orientación sexual "adulta" depende de la sociedad y del ambiente familiar.


?Cree Ud. que alguno de los factores anteriormente mencionados puede determinar por si solo si una persona será gay, heterosexual, o bisexual?

Dr. Bell: Cada ser humano está en la intersección donde se encuentran los cuatro factores, en una unión indisoluble de cuerpo, mente y emoción. Entonces me resultaría imposible explicar cualquier fenómeno humano, incluyendo la orientación sexual, como resultado de un solo factor.

Dr. Ellis: No.

Dr. Green: Probablemente no. La identidad sexual es demasiado compleja al nivel humano para poder ser causada por sólo uno de estos factores.

Dr. Herdt: No podemos saber a ciencia cierta si alguno de estos factores considerado individualmente pueda resultar en la auto-identificación como "gay," "heterosexual" o "bisexual." Pero mi opinión es que ello es muy dudoso.

Dra. Hooker: No, no creo que ninguno de estos factores pueda por sí solo determinar la orientación sexual de una persona. Tal y como he indicado anteriormente, la orientación sexual es muy compleja, y los factores que la determinan deberán ser igual de complejos. Aún la predisposición genética no podría determinar por sí sola la orientación sexual.

Dr. Marmor: Factores genéticos u hormonales pueden crear una fuerte "predisposición" a ser gay, heterosexual o bisexual, pero factores psicológicos y sociales "culturales" generalmente contribuyen al resultado último de la orientación sexual.

Dr. Money: No.

Dr. Pillard: Ya que sabemos tan poco acerca de las causas, es prematuro especular si un factor por sí solo podría ser causa única.

Dra. Reinisch: No.

Dr. Weinberg: Sí, pero sólo para una orientación gay o heterosexual, no para una orientación bisexual.

Dr. Weinrich: No, ninguno de los factores es causa "única", porque al menos en teoría, ninguno de los factores actúa independientemente de los otros.

¿Pueden las lesbianas y los gays cambiar su orientación sexual a través de terapia o de otra forma?

Dr. Bell: Las lesbianas y los gays pueden ser capaces de aumentar su potencial para la experiencia heterosexual y para comportarse sexualmente de forma heterosexual; al menos algunos de ellos pueden. Pero su orientación sexual básica quedaría prácticamente intacta.

Dicha orientación es muy compleja, demasiado profunda, para poder ser cambiada en cualquier grado substancial.

Dr. Ellis: Conforme a lo que he formulado, si factores neurohormonales son responsables por las variaciones en la orientación sexual, entonces sería tan difícil hacer que un homosexual prefiera tener relaciones sexuales con un miembro del sexo opuesto, como lo sería hacer que un heterosexual prefiera tener relaciones sexuales con un miembro de su mismo sexo.

Sin embargo, los bisexuales, teniendo una orientación sexual ambivalente desde un comienzo, podrían dirigir sus inclinaciones sexuales más o menos exclusivamente hacia actividades heterosexuales a través de la terapia.

Más deberá decidirse en cada caso individualmente, si ésta sería la alternativa más deseable.

Dr. Green: Dada la escasa investigación científica sobre las lesbianas que hayan tratado de cambiar su orientación sexual, no es posible brindar una respuesta significativa a esta pregunta. La información sobre hombres gays demuestra que la mayoría de los que quieren cambiar su orientación sexual no logran cambiar sus fantasías o su comportamiento.

Algunos cambian su comportamiento marcadamente, pero no sus fantasías. Algunos informes sostienen que a través de la terapia religiosa, Psiquiátrica o Psicológica, se ha logrado producir una reorientación sexual de fantasía y comportamiento. Dr. Herdt:

No existe prácticamente ninguna evidencia que sugiera que las lesbianas o los gays puedan cambiar su orientación sexual a través de terapia o de alguna otra forma. Toda la evidencia que he observado demuestra que aquello es imposible.

Dra. Hooker: No sé de ninguna evidencia que indique que las lesbianas y los gays puedan cambiar su orientación sexual a través de terapia o de alguna otra forma. Toda la evidencia que he observado demuestra que aquello es imposible.

Dr. Marmor: No creo que la capacidad de ser excitado eróticamente por miembros del mismo sexo pueda ser totalmente erradicada. Una minoría de gays y lesbianas -- generalmente aquellos con una capacidad bisexual -- pueden aprender -- si se les motiva suficientemente -- a suprimir su "comportamiento" homosexual, a través de terapia u otros medios. Pero la "inclinación homosexual" generalmente continúa en sueños y/o fantasías.

Dr. Money: No. Sin embargo, aquellos que estén en el rango bisexual de 60 a 40, 50 a 50, 40 a 60, podrían alegarse que son capaces de cambiar, aún sin terapia.

Dr. Pillard: La respuesta a esta pregunta depende de si se considera la orientación sexual como una característica innata, tal y como he sugerido anteriormente, o si se la considera un hábito, que siendo "aprendido," puede ser a su vez "desaprendido"

Yo diría que en ambos casos, muchos individuos pueden cambiar una homosexualidad o heterosexualidad exclusiva si así lo desean. Particularmente las mujeres parecen tener una orientación bisexual en la mayor parte de los casos.

Aún así, ninguna "terapia" puede alegar hoy en día que ha sido capaz de alterar permanentemente y con certeza, la orientación sexual. Además, si realmente consideramos cualquier orientación como moralmente igual, debemos preguntarnos porqué un individuo _querría_ cambiar su orientación.

Dra. Reinisch: No. Sabemos que la homosexualidad no es un fenómeno aprendido. Tal conclusión es evidente en base a estudios antropológicos realizados sobre los habitantes nativos de Nueva Guinea, cuyos niños participan regularmente en actos homosexuales entre las edades de 6 a 19 años. (Los nativos creen que sin el consumo diario de semen, dichos niños no se convertirán en adultos y serán incapaces de procrear)

A pesar de estar expuestos diariamente a actos homosexuales por 13 años, el 99% de los niños nunca vuelve a participar en actos homosexuales después de los 19 años de edad, cuando son apareados con una mujer.

Sabemos además, en base a estudios realizados de hermanos gemelos criados por separado, que si uno de los gemelos es gay, es probable que el otro gemelo sea gay también -- sin embargo éste no es el caso en cuanto a las lesbianas.

Como he dicho anteriormente, los niños criados por homosexuales o lesbianas no son más propensos a ser homosexuales que los niños criados por padres heterosexuales. Esto parece indicar que la homosexualidad no es necesariamente una conducta aprendida.

Consecuentemente no es probable efectuar a través de la terapia un cambio permanente en la atracción y en los componentes emocionales que rigen de quien uno se enamora.

Dr. Weinberg: No.

Dr. Weinrich: De nuevo, eso depende de la definición que se use. La orientación homosexual, tal y como yo la defino, es aparentemente rara vez -- o quizás nunca -- alterada a través de terapia u otros medios.


Conclusiones:

La mayoría de los 11 científicos entrevistados concurrieron que:

* Se desconocen las causas exactas de la heterosexualidad y de la homosexualidad.

* Tanto la homosexualidad como la heterosexualidad resultan probablemente de la interacción de varios factores, entre ellos factores genéticos, hormonales y ambientales;

* Las influencias Psicológicas y sociales de por sí no pueden ser causas "únicas" de la homosexualidad;

* Una predisposición biológica (genética, hormonal, neurológica u otro) a la homosexualidad, bisexualidad o heterosexualidad existe en todos los niños y niñas desde el nacimiento;

* Ninguno de los factores contribuyentes puede ser causa "única" de la homosexualidad;

* La orientación sexual de un individuo no puede ser modificada permanentemente mediante la terapia. Discusión


Las respuestas recibidas de 11 científicos prominentes deberán disipar el mito que un individuo escoge ser gay, bisexual, o heterosexual. La orientación sexual no puede ser seleccionada " lo que uno puedo escoger, es como uno actúa sexualmente.

El lector se puede preguntar: "Si aceptamos la teoría de la predisposición biológica de la orientación sexual, ?qué pasará cuando los científicos demuestren que la homosexualidad es transmitida genéticamente o es causada por algo que le haya sucedido a la madre durante el embarazo? ?Acaso impondría esto una nueva carga de culpa a los padres de las lesbianas y los gays?

No. La culpabilidad implica responsabilidad por una consecuencia negativa. Pero la homosexualidad no es un fenómeno negativo. Así como la heterosexualidad, la homosexualidad es un aspecto natural de la personalidad del individuo, y es esencial para que el individuo conduzca una vida plena y productiva. Los hombres y mujeres -- gays y no-gays -- que nieguen sus sentimientos sexuales inherentes, pueden privarse de mucha felicidad en sus vidas.

Sabemos a través de los escritos de Aristóteles y de varios estudios antropológicos, que la homosexualidad ha existido por miles de años. Cuando comparamos diferentes sociedades, vemos que la homosexualidad no es un problema, a menos que los miembros de dicha sociedad la convierten en un problema, a través de sus prejuicios y sus leyes restrictivas. Una sociedad que trata a sus miembros homosexuales como inferiores crea una gran injusticia contra algunos de sus mejores ciudadanos, así como contra sí misma. Dicha sociedad continuará viviendo con muchos conflictos auto-impuestos, especialmente a medida que la ciencia clarifique gradualmente los orígenes de la homosexualidad.

Por ejemplo, ?qué sucederá cuando los científicos desarrollen la tecnología que permita predecir si un feto será gay o heterosexual? ?Se examinarían las mujeres embarazadas para saber con anticipación cuál sería la orientación sexual de su niño al alcanzar la pubertad?

Si es que una prueba de laboratorio pudiese identificar un distintivo biológico para la homosexualidad o la bisexualidad en los cromosomos del feto, ¿decidirían los padres, temerosos del futuro de su hijo, terminar el embarazo prematuramente? ¿Podría un gobierno intolerante hacia la homosexualidad forzar a una mujer embarazada a tener un aborto porque su feto lleva el distintivo biológico de la homosexualidad?

En resumen, el ser lesbiana o gay es parte de la personalidad total del individuo, como el ser atleta, o artista, o zurdo. Dicha personalidad es moldeada desde la concepción por factores genéticos, prenatales, psicológicos y culturales.

A través de sus características únicas, los gays y las lesbianas añaden una diversidad especial al rico tejido de la vida humana, como (en palabras del Dr. Money:) "lo hicieron Miguel Angel, Leonardo Da Vinci, Tchaikovsky, Oscar Wilde, y miles do otros artistas, científicos, políticos, abogados, médicos, matemáticos, y demás genios, cuyos logros están inherentemente relacionados con su homosexualidad"

Para padres de hijos gays

A los padres y madres

¿Podrán entenderlo? ¿Y asumirlo?

Introducción.

A menudo es un choque para los padres el enterarse que su hijo o hija es homosexual.

Sea usted madre o padre, tenga usted un hijo/a, haya usted sospechado hace tiempo algo sobre eso, o haya sido una sorpresa total, enterarse con seguridad puede ser un choque.

Los sentimientos que lo sacuden son muy fuertes y confusos. Al principio es posible que usted no pueda casi hablar sobre eso sin lágrimas en los ojos, o sin sentir ira.

Cada familia es diferente y cada caso es singular: un padre puede haberse enterado por casualidad, a otra puede habérsele dicho cara a cara, un tercero pudo haber recibido una llamada telefónica o una carta; el/la hijo/a puede ser adolescente o adulto/a, aceptándose a sí mismo/a o trastornado/a con lo que él o ella es; los padres puede que estén listos para escuchar o que reaccionen alejándose de la situación. Todos ellos, sin embargo, tienen preocupaciones y preguntas básicas.

Primeras Reacciones.

¿Por qué tuvo que decírnoslo?

Muchos padres piensan que ellos serían mucho más felices sin enterarse. Usted debe tomar en cuenta, sin embargo, que si usted no lo supiera no conocería realmente a su hijo/a.

Una gran parte de la vida de él o ella sería un secreto para usted y usted nunca llegaría a conocer a ese ser humano en su totalidad. El hecho de que él o ella se lo haya dicho, es una señal de su amor y del apoyo o comprensión que él o ella necesita de usted. Después de todo, ¿quién debería saber sino usted? ¡A ningún otro grupo minoritario se le exige que esconda a sus padres aquello que los hace "diferentes!".

¿Por qué nos hizo esto?

Muchos padres sienten un amargo resentimiento hacia el hecho de la homosexualidad de su hijo. Este sentimiento está basado en el falso entendimiento de que ser homosexual es algo elegido, que ésta fue una decisión consciente, y que quizás, incluso, fue hecha para herirlos a ellos.

De hecho, los homosexuales no eligen su orientación sexual. Ellos simplemente son lo que son: la homosexualidad es su verdadera naturaleza.

La única alternativa que tienen la mayoría de las lesbianas y los gays es ser honestos sobre quienes son, o esconderlo. Esconderlo impone una tremenda carga. Significa vivir una mentira día tras día. ¿Qué padre o madre podría querer que un/a hijo/a suyo tenga que vivir de esa manera?

¿Qué hicimos de malo nosotros?

La mayoría de los padres se sienten culpables cuando se enteran por primera vez. La psicología y la psiquiatría nos han dicho durante años que la forma en que un/a hijo/a resulta ser es "culpa" de los padres. De hecho, ningún padre tiene tanto poder sobre un/a hijo/a.

Los homosexuales se encuentran en todo tipo de familias, con todo tipo de antecedentes. Nadie sabe hasta ahora qué "causa" ningún tipo de sexualidad, pero es ampliamente aceptado que la orientación sexual de un/a niño/a ya está establecida a una temprana edad, o al nacer.

Preocupaciones de los padres por los hijos.

¿Estará él o ella sujeto/a al ostracismo, tendrá él o ella problemas para encontrar y mantener empleo, o incluso a ser atacado/a físicamente?

Tenemos que responder que sí, desafortunadamente, estas cosas son posibles. Esto depende de dónde él o ella decida vivir, que tipo de trabajo desee y cómo decida comportarse.

Pero nos consta que las actitudes hacia los homosexuales han ido mejorando y son más positivas en muchos lugares. También hay un creciente número de grupos que están trabajando hacia esos cambios y que están listos para ayudar a aquellos que tengan momentos difíciles.

¿Estará él o ella solo/a en su vejez si no tiene su propia familia?

Quizás sí, pero debemos recordar que esto sucede muy a menudo con todos nosotros. Esposos mueren, matrimonios se disuelven, hijos a menudo viven lejos y muchas parejas jóvenes no tienen hijos del todo. Muchos de nosotros tenemos que adaptarnos a menudo a la soledad de nuestra vejez. Por otro lado, muchas lesbianas y gays desarrollan relaciones duraderas y la comunidad gay presta un cálido apoyo a sus miembros. Cuando más se les facilite "salir del closet (armario)," o sea, reconocer su orientación sexual a ellos mismos y a los demás, más homosexuales tendrán la oportunidad de vivir por toda su vida como parte de una comunidad. Las lesbianas y los gays incluyen bajo su concepto de "familia" no solo a su familia consanguínea, sino también a sus compañeros de muchos años o de toda una vida. Están empezando a existir ya organizaciones para homosexuales de edad avanzada:

¿Debemos enviar a nuestra/o hija/o a un siquiatra para que la/lo "cure"?

Hoy en día es generalmente reconocido por la comunidad psiquiátrica que la homosexualidad no es, como era previamente considerada, una enfermedad que pueda ser curada.

En diciembre de 1973 la Asociación Psiquiátrica Americana (en los Estados Unidos) declaró que la homosexualidad en sí no es un desorden mental o una enfermedad. La Asociación Psicológica Americana ha tomado la posición oficial de que no sería ético tratar de cambiar la orientación sexual de un homosexual.

Sin embargo, mucha gente que es homosexual está tan imbuida en los prejuicios de nuestra sociedad, que no puede aceptar como normal su orientación sexual. En estos casos es a menudo beneficioso obtener ayuda psiquiátrica o psicológica con el propósito de aceptarse a sí mismo.

Hay que tener mucho cuidado, sin embargo, en seleccionar un psicoterapeuta que no esté él o ella mismo/a imbuido/a en esos prejuicios.

Preocupaciones de los padres consigo mismos.

¿Debemos decírselo a la familia?

Los padres aún tienen dificultad en aceptar la homosexualidad de sus hijos se preocupan a menudo de que los demás vayan a enterarse.

¿Cómo pueden ellos responder a las preguntas que los familiares les hacen con frecuencia: "¿Tiene novia?" "¿Cuándo se casa?" Nuestro consejo en tales situaciones es: primero y ante todo no debe usted confiar en nadie a menos que tenga el consentimiento de su hijo/a.

Es la vida de él o de ella que usted discute, y él o ella tiene el derecho a decidir quien debe saber y quien no.

Segundo, no debe usted decírselo a nadie a menos que usted mismo/a haya alcanzado el punto en que no se siente a la defensiva al respecto.

Lleva tiempo aprender a aceptar a su hijo/a y a menos que la actitud suya sea positiva, comunicará su infelicidad o duda a los demás. Cuando se sienta usted listo/a se le hará más fácil discutirlo con una persona a la vez.

¿Qué dirán los vecinos?

Esta es una preocupación muy real, entre las familias que viven en pequeñas comunidades, donde sus vidas sociales dependen de la buena voluntad de la gente que los rodea. La respuesta a esa pregunta es muy parecida a la anterior.

Cuando esté seguro/a de sus propios sentimientos e informado/a sobre la materia, entonces podrá hablar sobre la orientación sexual de su hijo/a con los demás y ayudarlos a ellos a comprender que el prejuicio contra la homosexualidad está basado en el temor y la ignorancia.

¿Cómo podemos entender a tratar con esto?

Quizás la mejor manera de contestar esta pregunta es dejando que otros padres hablen por sí mismos. He aquí la historia de una madres que descubrió que su hijo era gay:

Historia de una madre.

Nosotros tenemos tres hijos, dos de los cuales son homosexuales. Cuando el mayor tenía dieciocho años él nos dijo que era gay. La respuesta de mi esposo fue sencilla: "¿Estás seguro?"

Y por mi parte tuve un gran sentimiento de culpa y fracaso, preguntándome en qué habíamos fallado. Nosotros hemos sido siempre una familia unida y cariñosa y sentí temor de que nuestra relación con nuestro hijo mayor sufriera como el resultado de su homosexualidad.

Me preocupaba además su felicidad y bienestar futuros, también a mi esposo.

Al poco tiempo me di cuenta que nuestro hijo era el mismo que siempre quise y conocí pero que a través de la honestidad ahora lo conocía mejor; la comprensión la logramos más tarde, después que nuestro hijo nos dirigió hacia el grupo de "Padres de Gays".

Yo dejé de sentirme sola, nuevas ventanas de comprensión se me abrieron al hacer preguntas, escuchar y leer. Fue una etapa difícil pero positiva en mi vida que tomó tiempo y paciencia. Me siento feliz de decir que hoy nuestra familia está tan unida como siempre, pero nuestra relación es más sincera y abierta que antes.

Historia de un padre.

¿Qué sentí yo cuando supe que mi hija era lesbiana? Es difícil de decir. Fue una mezcla de sentimientos.

Mi primer sentimiento - la vida va a ser difícil para ella. Ella es diferente y por lo tanto sufrirá las consecuencias de ser diferente: sospecha, temor y rechazo a manos del tal llamado "mundo normal". Ella llevará una etiqueta: "peligrosa y contagiosa, no se le acerque, protéjase".

Esto me hizo sentir triste al principio, luego enojado, luego protector. ¿Cómo podría yo ayudar a mi hija? Decidí aprender más acerca de la homosexualidad. ¿Por qué sucede? ¿Puede ser curada? Más tarde me enteré que la primera pregunta hasta ahora no tiene respuesta y la segunda es ilógica, ya que no es una enfermedad.

Yo leí mucho y eso me confundió. Las opiniones expresadas por varios autores, en algunos casos diferían drásticamente, estaban basadas en sus experiencias y en lo que estaban tratando de probar.

Fue mi hija quien me dirigió a mí y a mi esposa a "Padres de Gays". Fue allí donde me di cuenta que no estaba solo. Los mismos sentimientos de culpa, de insuficiencia y de pesar, eran compartidos con muchas personas. Había, sin embargo, un sentimiento que no compartía.

Muchas personas estaban enojadas con sus hijos/as por ser homosexuales, pues sentían que esto les había traído vergüenza. Desde que nuestra hija nos dijo que era lesbiana, mi esposa y yo hemos aprendido más sobre la orientación sexual, nos hemos sentido mucho más allegados a nuestra hija.

Antes de esto había veces que ella parecía alejada, infeliz e incluso impaciente con nosotros. Esto ha cambiado del todo. Yo podría continuar con muchos más detalles pero creo que las palabras dichas por mi hija recientemente lo resumen todo: "Papá, yo nunca había estado tan feliz y tranquila como lo estoy ahora, porque ustedes saben y comprenden."

Hemos aceptado la situación, pero, ¿por qué tienen que hacer alarde de ella?

Muchas veces aún los padres que han aceptado la homosexualidad de su hijo/a se quejan del comportamiento abierto.

Se incomodan y enojan al ver demostraciones de atracción sexual en público entre personas del mismo sexo. Nosotros sugerimos que esto es un resultado normal de la manera en que todos hemos sido criados y de los que se nos ha enseñado sobre el sexo en general, particularmente sobre la homosexualidad. A pesar de que esto es completamente comprensible, debemos verlo como nuestro problema, y no el problema de los homosexuales.

Si los heterosexuales pueden demostrar afecto abiertamente en público, no hay razón lógica por la cual los homosexuales no puedan hacerlo también. Si usted siente que la conducta sexual debe ser algo privado, entonces esto debe aplicárselo a todos.

Preguntas de interés general.

¿Es la homosexualidad antinatural?

La homosexualidad no es antinatural puesto que existe en la naturaleza. Es tan natural para una persona el ser heterosexual como lo es para otra el ser homosexual. No sabemos por qué las personas son homosexuales, pero sí sabemos que siempre hubo, hay y habrá homosexuales.

Se estima que el 10% de la población de los E.E.U.U. y a través del mundo es lesbiana o gay; al menos una persona en cada cuatro familias. Para ellos su homosexualidad es su verdadera naturaleza. Pedirles que se comporten de otra manera sería pedirles que se comporten antinaturalmente.

¿Y sobre el SIDA?

El SIDA no es una enfermedad "gay". Las lesbianas, por ejemplo, están en uno de los grupos de menor riesgo en nuestra sociedad. Esta es una enfermedad transmitida sexualmente, la cual puede ser también transmitida por agujas o jeringas no esterilizadas.

En Africa la enfermedad ha atacado a los heterosexuales predominantemente; en los E.E.U.U. por razones desconocidas se propagó inicialmente entre los homosexuales del sexo masculino.

Estudios recientes han mostrado que actualmente se está igualmente propagando entre los heterosexuales. La infección afecta a los drogadictos en los E.E. U.U., a través de jeringas y agujas no esterilizadas, y en los países del tercer mundo sucede debido a la esterilización inadecuada cuando se recibe atención médica.

El SIDA no es nada de lo que sentirse avergonzado.

Este no es necesariamente el resultado de haber llevado una vida promiscua y el hecho de que alguien la halla adquirido no dice nada sobre qué tipo de persona es. El hecho más importante no es el saber como una persona fue infectada, sino el hecho de que esa persona está enferma y necesita ayuda.

El SIDA es difícil de adquirir.

No hay nada que indique que el SIDA sea transmitido de ninguna manera sino por aquellos medios ya indicado, por lo tanto no existe razón alguna para evitar contacto con miembros de su familia que tengan SIDA.

Por último, la manera que un padre o una madre se enfrente al SIDA debe depender de las personal con la enfermedad. Algunas querrán decírselo a los demás, otras querrán mantener la información en privado. Algunas querrán tener cerca a sus padres, otros no, y algunos querrán hablar con usted sobre el tema, mientras que otros evitarán el tópico.

Más tengan presente, que todas las personas con SIDA necesitan amor y cuidados. Mostrar nuestro apoyo y cariño es más importante que nunca.

Conclusión.

Aceptar la homosexualidad de su hijo/a y educarse a si mismo/a sobre el tema lleva tiempo. Los/as hijos/as a menudo esperan que sus padres los/as comprendan de inmediato, pero para muchos de ellos no es posible. No sea impaciente consigo mismo/a. No importa cuanto tiempo le lleve. Si realmente desea aprender y comprender, usted lo logrará.


A

El despertar de la homosexualidad

EL DESPERTAR DE LA HOMOSEXUALIDAD


Aceptado está por la psicología moderna, que la tendencia homosexual comienza a manifestarse en la preadolescencia (entre los 10 y los 13 años), época en que los cambios físicos, psicológicos y sociales en el niño, inciden especialmente en su desarrollo `posterior.

A partir de aquí, el varón homosexual pasará por cuatro fases, hasta la aceptación y compromiso de su tendencia sexual. Estas fases son:

1ª FASE DE SENSIBILIDAD (entre 10 y 13 años):

El preadolescente se siente "diferente" a los demás niños, sin entender la razón de este sentimiento. En muchos casos trata de ignorarlo y no es corriente que produzca sufrimiento o angustia.

2ª FASE DE CONFUSIÓN.(entre 14 y 17 años):

El muchacho es plenamente consciente de su atracción por el mismo sexo, Normalmente utiliza mecanismos para "ignorar" y también "rechazar" sus impulsos homosexuales.

Es frecuente que éste rechazo se manifieste con síntomas, como TEMOR, IRA, SENTIMIENTO DE CULPA, AISLAMIENTO, VIOLENCIA.

El adolescente desea, pero no se atreve a tener relación con otro chico.
Suele perfilarse ya el modelo masculino preferido.

Es frecuente la "fijación" por un varón conocido (compañero de grado, profesor, pariente etc).

3ª FASE DE IDENTIDAD ASUMIDA (a partir de los 18 años):

El chico acepta su inclinación, pero manteniendo en secreto su actividad sexual, mostrándose heterosexual al objeto de no ser rechazado. Es una etapa de gran tensión y conflicto íntimo, con gran riesgo de depresiones y a veces intentos suicidas.

El entorno social, familiar, escolar o laboral suele ser fuertemente heterosexual y muchas manifestaciones cotidianas son claramente de carácter homófobas.

4ª FASE DE COMPROMISO (en algunos casos):

El individuo revela su identidad homosexual, aceptando los inconvenientes sociales que de ello se derivan. Normalmente se produce cuando existe un ambiente familiar favorable.

El no superar las distintas fases conlleva riesgos, que van desde el fracaso escolar hasta el intento de suicidio, pasando por "alternativas" como la promiscuidad, el alcoholismo, la drogodependencias y la prostitucion.

Siendo las tres primeras etapas o fases, las mas delicadas por los peligros antes enunciados, es RECOMENDABLE para todos los adolescentes con tendencia homosexual, la cercanía o contacto estrecho con un adulto ( maestro o médico* de familia preferentemente o cualquier psicólogo o psicóloga) con el que poder "descargar" su angustia y pueda ser ayudado en la superación de las fases citadas en el caso que el adolescente lo requiera.

Esto no significa necesariamente que el adolescente deba contar su vida privada si el profesional en cuestión lo "obliga" a decir las cosas puesto que el profesional debe brindar la confianza y garantías de confidencialidad que el muchacho requiera.

Cabe destacar que así como en el mundo se dan excepciones en el sentido que hay profesionales "no moralmente capacitados" y el (la) adolescente debe ser cauto(a). No se trata de desconfiar de todo el mundo, pero una gota de desconfianza no hace mal...